Aunque Suiza es un lugar “paradisíaco” en cualquier época del año, lo cierto es que el otoño es una estación muy especial en el país. No solo por los preciosos cambios que se producen en el entorno natural, sino por la cantidad de actividades que se presentan y que convierten estos meses en algunos de los más entretenidos para ciudadanos y turistas. Y, como ejemplo, aquí van cinco planes que se pueden completar en el territorio suizo en estas fechas.
Una inolvidable excursión
Como decíamos, en otoño cambia el aspecto de la naturaleza y el follaje vegetal es el ejemplo perfecto. Los árboles se tiñen de tonos dorados y rojizos, y las más de 9.500 rutas de senderismo que recorren el país nos permiten admirar, con calma, toda esta paleta de colores. En este sentido, mediados de octubre es la época ideal para la mayoría de las excursiones en Suiza, ya que la temperatura todavía es agradable para pasear, las condiciones de los senderos siguen siendo bastante buenas y no nos cruzaremos con demasiada gente en la travesía.
Atravesando Suiza en tren…
Viajar en tren no es solo la forma más rápida y cómoda de viajar entre las principales ciudades helvéticas. Desde las ventanas de los vagones podremos admirar el paisaje exterior. Tanto es así que hay algunas rutas en este medio de transporte que tienen como único objetivo este propósito. El Expreso de Bernina, por ejemplo, ofrece vistas fascinantes de lagos, montañas y glaciares. O la ruta férrea Eigergletscher – Jungfraujoch, que nos lleva a la estación de tren más alta del continente. Como consejo, no dejéis de sacaros el Swiss Rail Pass, que nos permite viajar tanto como queramos e incluye viajes gratuitos en tren, transporte público en las ciudades y entradas a museos.
… o surcándola en barco
Recordemos que Suiza es un país repleto de lagos (en el país hay unos 1.500) y ríos. Por eso, otra buena opción es desplazarse sobre las aguas, desde cruceros con cena romántica a viajes de una ciudad a otra en este medio. Si eres aventurero, puedes además alquilar kayaks y pasear por tu cuenta, y en algunos de los lagos más grandes se pueden practicar deportes acuáticos como surf de remo, esquí acuático o windsurf durante todo el año.
¡Brindar en el Oktoberfest!
Para los adultos, octubre es también un gran mes si te gusta la cerveza. Si bien es cierto que la tradición es típica de Múnich (Alemania), hay una versión de la Oktoberfest en la mayoría de las grandes ciudades europeas. En el caso de Suiza, la más famosa tiene lugar en Zúrich, en una isla artificial del río Limmat. Dura aproximadamente un mes, desde principios de octubre hasta principios de noviembre, tiene lugar un gran festival con música en directo, comida bávara, mucha cerveza y, sobre todo, un gran ambiente festivo.
Esquí en Matterhorn
Por último, no podíamos olvidarnos de una de las actividades favoritas por los suizos y quienes visitan el país: el esquí. En octubre ya empiezan a caer las primeras nieves en las cumbres más altas y, por eso, localidades como la preciosa Zermatt, quizá el pueblo y la estación de esquí suizos más conocidos, empiezan a llenarse de amantes de este deporte. La bucólica arquitectura de madera, las innumerables rutas de senderismo, la estación de montaña más alta de toda Europa (a 3883 metros de altitud) y, por supuesto, la montaña Matterhorn, lo convierten en destino obligado para estas fechas.