Hacer algo que aporta al bienestar de otra persona sin esperar algo a cambio es altruismo. Dedicar tu tiempo a los demás, compartir, cuidar de otras personas y tratar de ayudar a quienes lo necesitan.
Todos estos actos traen felicidad. Ser altruista te hace más feliz, porque el poder ayudar a otra persona trae satisfacción y una experiencia positiva.
Si todos fuéramos un poco más altruistas, el mundo sería un lugar mucho más bonito. No tiene que ser algo grande; un gesto pequeño o un acto muy sencillo puede hacer mucho más de lo que pensamos.