El Colegio Suizo de Madrid cumple 50 años. Esto no es cuestión baladí, sino el reflejo de que ha sabido representar un valor intrínseco de la idiosincrasia suiza: “la firmeza”. Este valor, como pilar de la tolerancia a la multiculturalidad y de la adaptación, fomenta la individualidad del sujeto a educar.
Todos y cada uno de los que componen la comunidad educativa deben compartir este valor de firmeza moral, de lealtad a los valores suizos, para persistir a pesar de los avatares y tiempos difíciles, como lo hizo nuestra nación en la historia.
A la vez, enorgullecerse de pertenecer a un sector tan reconocido mundialmente, como es la educación suiza, responsable de formar a los futuros líderes de tantos países.