Tal y como hemos visto en este blog en otros artículos, Suiza es sin duda uno de los países más innovadores del mundo. No en vano, se trata de un país que apuesta decididamente por la investigación y el desarrollo, como demuestra el hecho de que, en 2019 invirtió el 3,15% del PIB anual en estas partidas.
Como no podía ser de otra manera, la educación va acorde con ello. Así, el país alberga 12 universidades públicas, incluidos dos institutos federales de tecnología, en Lausana y Zúrich, nueve universidades de ciencias aplicadas y arte, y docenas de institutos de investigación de vanguardia.
También en la enseñanza básica se intenta, desde el primer momento, animar a los niños a que experimenten y descubran cosas nuevas. Una premisa que cumplimos a rajatabla en el Colegio Suizo de Madrid y que ya hemos comprobado con algunas de las iniciativas propuestas por los profesores que hemos compartido con vosotros.
Todo este cóctel permite que la nación helvética sea, históricamente, cuna de grandes creadores. Una tradición que se mantiene hasta nuestros días y que vemos reflejada en esta lista, elaborada por el medio swissinfo.ch y que recoge los mejores inventos y proyectos de investigación en Suiza en 2022
Una batería de papel
Científicos del Laboratorio Federal Suizo de Investigación y Ensayo de Materiales (EMPA) han desarrollado una novedosa idea para ayudar a resolver la contaminación causada por el uso de pilas desechables. Se trata de una pila de papel que funciona a base de sal y tintas y se activa con tan solo unas gotas de agua. En un plazo de dos a cinco años, esta tecnología podría utilizarse en aparatos electrónicos de un solo uso y de bajo consumo, como por ejemplo dispositivos de diagnóstico médico o envases inteligentes.
Un «micrófono inteligente» que detecta lobos
La población de lobos en Suiza es cada vez más numerosa y su seguimiento empieza a ser complicado. Por eso, investigadores de la Escuela Politécnica Federal de Lausana (EPFL) han inventado un dispositivo que utiliza inteligencia artificial para grabar e identificar los silbidos, aullidos y otros ruidos de los animales en los Alpes. Los datos se envían automáticamente a través de la red de telefonía móvil a un servidor informático donde se procesan y analizan. El «Smart Mic» puede identificar con precisión el aullido de un lobo con una exactitud de 500 metros. Un dispositivo muy barato ya que el prototipo cuesta, aproximadamente, 450 euros.
Un detector de virus en el aire
Científicos de la EPF de Zúrich y del Laboratorio Federal Suizo de Investigación y Ensayo de Materiales (EMPA) llevan tiempo investigando sensores capaces de «ver» y «sentir» virus en el aire. A principios de 2020 se centraron en la identificación del SARS-CoV-2 en el aire. En otoño de este mismo año anunciaron la creación de «CAPS», un sistema de biosensores para la «detección cuantitativa de virus en espacios cerrados” que tiene como objetivo ayudar al personal sanitario con alto riesgo de infección por Covid-19 en hospitales o residencias de ancianos. Los investigadores esperan que su invento pueda utilizarse también en lugares concurridos, como estaciones de ferrocarril, para detectar posibles concentraciones elevadas del virus.
Un purificador de agua que funciona con energía solar
Científicos de la EPFL han inventado un filtro purificador de agua sencillo y muy eficaz que utiliza energía solar para producir agua limpia, capaz de ayudar al abastecimiento de este preciado bien en regiones en las que escasea. Entretejiendo nanocables de dióxido de titanio con nanotubos de carbono, el equipo creó un material filtrante compuesto que, cuando se combina con luz ultravioleta, produce unas moléculas capaces de eliminar bacterias y virus de gran tamaño en el agua.
Varios estudiantes construyen un avión eléctrico
El proyecto e-Sling, puesto en marcha durante dos años por 20 estudiantes de ingeniería mecánica de la EPF de Zúrich, consistió en la creación un avión eléctrico de cuatro plazas alimentado por baterías. Empezaron con un armazón exterior de avión procedente de Sudáfrica, un sistema de propulsión eléctrico, alimentado por un sistema modular de baterías dotado de una red especial de refrigeración. Y, por último… ¡a volar!
Una red de calefacción utilizando CO2
Las emisiones de dióxido de carbono son un quebradero de cabeza. Sin embargo, pueden tener un futuro más limpio, tal y como hace entrever el prototipo de red térmica que utiliza CO2 como fluido en las tuberías y que se está probando en Suiza. El sistema, con una capacidad de 500 kilovatios (kW) de energía térmica, se encuentra en el sótano del campus Energypolis de la ciudad meridional de Sion. Los diseñadores del proyecto afirman que debería ser posible transportar CO2 líquido y vapor procedente de fuentes renovables y calor residual mediante tuberías más compactas y baratas para conectar edificios. Los impulsores del proyecto creen que es posible tener una red operativa en dos o tres años.
Un gel para tratar el cáncer de piel
El cáncer de piel es uno de los más comunes en la población. Científicos de la Universidad de Berna han desarrollado un tratamiento con hidrogel para el melanoma, que aplicado directamente sobre la zona tumoral activa las defensas del organismo contra este. En los ensayos, los ratones con melanoma mostraron una supervivencia significativamente prolongada tras el tratamiento. Los creadores de la tecnología planean ahora realizar ensayos clínicos con pacientes para comprobar la eficacia del gel.
Un sistema nervioso controlado por pastillas
Tres pacientes cuya parte inferior del cuerpo quedó completamente paralizada tras sufrir lesiones medulares pudieron caminar, montar en bicicleta y nadar gracias a un dispositivo de estimulación nerviosa controlado por una tablet, desarrollada por un equipo de investigadores dirigido por la EPFL. Los tres pacientes pudieron ponerse de pie y pisar con ayuda inmediatamente después de la operación. En los seis meses siguientes recuperaron la capacidad de realizar actividades más avanzadas -caminar, montar en bicicleta y nadar- controlando ellos mismos los dispositivos mediante una tableta.
Imagen portada: ETHZ