Tras 16 años estudiando en el Colegio Suizo de Madrid, Ana Torre acaba de dar un paso más en su formación y, desde el pasado mes de septiembre, después de superar los exámenes de Matura, está estudiando un grado de matemáticas en la prestigiosa universidad ETH de Zúrich, ciudad a la que se mudó en agosto. Ana nos cuenta cómo están transcurriendo estas primeras etapas de su nueva vida.
¿Por qué decidiste continuar con tus estudios superiores en la ETH?
Mi principal razón para escoger la ETH para seguir estudiando es su prestigio internacional, ya que es una de las universidades más importantes de Europa, y es considerada la mejor universidad de habla no inglesa del mundo. Además, es una universidad muy internacional, habiendo estudiantes de todas partes del mundo. Esto hace que la experiencia universitaria no sea sólo una experiencia académica, sino también cultural.
Otra razón que me impulsó a escoger esta universidad es las facilidades que supone para los que hemos estudiado en el CSM. Habiendo aprobado la Matura, no hay nota de corte y no es necesario hacer ningún examen de ingreso (excepto para la carrera de medicina). Otra ventaja importante, es haber estudiado casi toda mi vida en alemán. En la ETH la gran mayoría de las clases son en alemán durante el Bachelor. Viniendo de una escuela suiza en la que casi todo se imparte en alemán no supone ningún problema tener las clases en alemán, y tenemos la ventaja de no tener que acostumbrarnos a un nuevo idioma. Además, como salí del colegio con un nivel alto de inglés es más sencillo comunicarse con cualquier persona aquí, y es útil también ya que las clases en el Master son mayoritariamente en inglés.
¿Y por qué elegiste Zúrich?
La verdad que no pensé mucho en la ciudad cuando decidí venir aquí. Elegí Zürich básicamente por la universidad.
Antes de venir no sabía nada de la ciudad, pero ahora que llevo ya tres meses aquí puedo decir que me está encantando. Es una ciudad muy tranquila, bien organizada, limpia y muy segura. Refleja perfectamente lo que es Suiza y los suizos.
También es verdad que la ciudad de Zürich me venía bien a mí en concreto, ya que tengo la nacionalidad suiza. Aun viniendo de España, si tienes la nacionalidad todas las gestiones (por ejemplo, el permiso de residencia) son mucho más sencillas y más rápidas.
Describe tus emociones cuando llegaste a Zürich
Como era de esperar antes de ir a Zürich estaba muy nerviosa. La noche antes del viaje no dormí nada, así que estaba también muy cansada, y lo único que quería era irme a dormir. Al ser el primer día tenía que hacer bastantes cosas (por ejemplo, abrir una cuenta en el banco), por lo que tampoco tuve mucho tiempo de preocuparme y sentirme nerviosa.
Cuando haces un cambio tan grande en tu vida, al principio cuesta asimilarlo, es como que no te lo crees del todo. No fue hasta que se fueron mis padres de vuelta a Madrid y me quedé sola que realmente me di cuenta que me habia mudado a otro país. En ese momento es cuando ya empiezas a sentir todas las emociones de golpe (nervios sobre todo).
¿Cómo te preparaste para dar este paso?
Yo me considero una persona que se pone nerviosa muy fácilmente, así que los meses antes de venir a Zürich estaba bastante agobiada.
Lo primero que hice fue en octubre-noviembre del año pasado fue empezar a buscar alojamiento. Cualquier persona que se haya mudado aquí puede confirmar que encontrar un sitio para vivir en Zürich es muy complicado. Todos los años llega mucha gente a trabajar y sobre todo muchos estudiantes. Zürich tampoco es una ciudad especialmente grande, y es muy difícil acomodar a todo el mundo. Las residencias de estudiantes están llenas y suelen tener mucha lista de espera. Por eso es muy importante empezar a buscar alojamiento y apuntarse a todas las listas de espera cuanto antes.
Hasta que no se acerca el verano no se puede preparar mucho más, aparte de matricularse en la universidad. Ya en verano empecé a ultimar los detalles del viaje y a organizar todas las gestiones que hay que hacer.
Prepararse mentalmente es más complicado. A mí como me gusta saber todo lo posible sobre lo que me voy a encontrar, me sirvió el buscar toda la información posible. Leí mucho sobre mi carrera en la web de la ETH, vi varios vídeos explicativos e intenté tener todo claro antes de empezar las clases.
Tuve también la suerte de que mis padres hicieron el primer viaje conmigo y se quedaron unos días en Zürich, así que tuve ayuda para organizarme bien e instalarme. Los primeros días son un poco agobiantes, pero en cuanto te instalas y ya tienes todo más o menos organizado, te tranquilizas y todo es mucho más fácil.
¿Cómo fueron los primeros Vorlesungen y Übungen?
Para quienes no lo sepan, la carrera está dividida en dos tipos de clases: Vorlesungen y Übungen. Las Vorlesungen se hacen con todos los alumnos en auditorios grandes, donde el profesor explica la teoría. Las Übungen se llevan acabo en grupos de unos 30 alumnos en clases más pequeñas. En estas clases un TA (Teaching Assistant) repasa lo explicado en la Vorlesung y se hacen ejercicios y ejemplos más concretos. Aquí hay también más oportunidad para hacer preguntas y resolver dudas de forma más personal.
Siendo sincera, en mis primeras Vorlesungen del semestre no me enteré de nada, fue como si los profesores hablasen en chino. Utilizaban símbolos que yo no había visto nunca, la notación y las palabras que utilizaban no eran iguales que en el colegio, y además iba muy rápido. Luego hablando con otros compañeros de mi clase y de otras carreras me di cuenta de que es normal, le pasa a todo el mundo. Es un cambio de ritmo muy grande respecto al colegio (por ejemplo, los profesores no esperan a que todo el mundo lo haya entendido) y lleva un tiempo acostumbrarse.
Al final yo creo que lo mejor es encontrar una técnica que le sirva a cada uno, para poder seguir el ritmo y entender la materia. Yo por ejemplo en clase de física prefiero no copiar todo lo que pone en la pizarra (porque no me da tiempo) y simplemente hago anotaciones sobre los apuntes del profesor. En cambio, en clase de análisis me gusta escribir todo en detalle y luego pasarlo a limpio. Todo es cuestión de encontrar algo que funcione para entender lo máximo posible y llevar las clases al día.
¿Qué es nuevo o diferente?
La verdad es que es la universidad es un cambio muy grande con respecto al colegio. Lo que más se nota es la libertad que tienes a la hora de organizarte las clases y el tiempo de estudio. Por ejemplo, la asistencia no es obligatoria, y todas las clases se suben a una plataforma de video de la ETH, por lo que ningún profesor se para a controlar qué alumnos van a clase. Tampoco se revisa si los alumnos entregan los ejercicios, y se tiene total libertad sobre si hacerlos o no.
Esto por una parte es algo positivo, ya que puedes organizarte a tu manera, como a ti te venga mejor. Por ejemplo, si una hay una asignatura en la que vas muy atrasado, igual te viene bien dedicarle menos tiempo a ejercicios y clases de otras asignaturas que lleves mejor, para recuperar el temario que has perdido. Por otra parte, hay que tener mucha fuerza de voluntad y capacidad de organización para lidiar con esta libertad. En mi opinión, lo más importante para organizarse es saber exactamente que se te da mejor o peor, y a qué asignaturas necesitas dedicarle más tiempo.
Otro cambio muy importante respecto al colegio es el número de alumnos que hay en clase. Puede parecer una tontería, pero pasar de 20 a 600 personas en una misma aula fue un shock muy grande para mí. Las clases son mucho menos personales; los profesores no se saben tu nombre y no ayudan a los alumnos con sus dificultades individualmente. Para mucha gente (incluida yo) es también difícil levantar la mano para hacer preguntas en un aula llena de gente que no conoces.
El último cambio grande que he notado es el hecho de vivir fuera de casa. No tiene que ver directamente con las clases, pero evidentemente afecta a mi vida diaria. Básicamente llegas a una ciudad nueva y de repente todas las gestiones que antes hacían tus padres, las tienes que hacer tú (abrir una cuenta en el banco, contratar una tarifa móvil, pagar el alquiler…)
¿Lograste un comienzo exitoso?
La verdad es que los primeros meses han ido mucho mejor de lo que me imaginaba. Me he adaptado muy rápido a la ciudad y al ritmo de la universidad y ya he conocido a muchísima gente. Si que es verdad que las clases me están costando mucho más que en el colegio, pero es algo con lo que contaba y no me ha pillado por sorpresa.
Así que en general considero que el principio de curso ha sido un éxito.
¿Ya has conseguido hacer amigos?
Hacer nuevos amigos en un entorno nuevo como es la universidad, y en mi caso en un país nuevo, es muy difícil, no os voy a engañar. Por muy bien que hables el idioma local, siempre te va a resultar más complicado expresarte en ese idioma que en tu idioma materno.
Yo he tenido la suerte de que tengo 10 compañeros de mi clase de Madrid que también viven en Zürich (de hecho una de ellas vive conmigo). Esto nos ha ayudado a todos sobre todo al principio. Cuando llegas a una ciudad nueva siempre está bien tener gente conocida por si tienes cualquier problema. Es verdad que cada uno de nosotros estudia algo diferente y apenas coincidimos en clase, pero de vez en cuando está bien poder ver y hablar con amigos de toda la vida.
A parte de eso, yo estoy viviendo en una residencia de estudiantes, y en un entorno como este es muy fácil conocer gente. Entre semana, por ejemplo, cenamos todos juntos en un comedor grande, y es inevitable acabar haciendo amigos.
En la universidad me costó un poco más conocer gente, ya que soy un poco tímida y no suelo acercarme a la gente para hablar. Antes de que empezasen las clases me apunté a un «Pre-Study Event», un evento para presentar la carrera y contestar dudas. Allí hicimos unas actividades en pequeños grupos y conocí a gente, con la que luego volví a coincidir cuando empezaron las clases.
También se organizan muchos eventos tanto dentro como fuera de la universidad. Cada carrera tiene un «Verein» que organiza todo tipo de eventos. En Zürich, debido a la cantidad de estudiantes hispanos que hay, existe también una organización para estudiantes españoles y latinos, que a lo largo del semestre organiza eventos, torneos deportivos, fiestas, etc.
En resumen, yo creo que lo importante es no cerrarse a nadie (aunque a mí me cueste un poco) e intentar hablar un poquito con todo el mundo hasta que al final encuentres a tu grupo de amigos. Hay tantísima gente en la universidad que al final siempre acabarás encontrando a tu gente. Fuera de la universidad, al principio cuando aún no hay que estudiar mucho y hay más tiempo libre, lo mejor es apuntarte a todas los eventos y planes que puedas. Así se conoce a un montón de gente desde el principio, y no se tiene que hacer el esfuerzo a mitad de semestre.
¿Qué desafíos te esperan?
De momento sólo estoy pensando en terminar bien el semestre en diciembre e intentar entender más o menos lo que estoy estudiando en clase.
Los exámenes del primer semestre empiezan a mediados de enero, así que mi siguiente preocupación sería hacer un buen plan de estudio y empezar a estudiar después de Navidad. Los exámenes son lo que más me preocupa a mí y a todo el mundo, y desde el principio ha habido gente que me ha metido mucho miedo. Es cierto que mucha gente suspende las “Basisprüfungen” (los exámenes del primer año), pero llevando el temario al día y organizándose bien para estudiar, no creo que sea imposible aprobar.
Así que eso es en lo que me voy a concentrar ahora, seguir llevando las clases al día, y empezar a prepararme para cuando tenga que estudiar en diciembre.